Las legumbres, ese grupo de alimentos versátil y lleno de nutrientes, han sido un elemento básico en la dieta humana durante siglos. Desde las tradiciones culinarias ancestrales hasta las tendencias alimentarias modernas, las legumbres han demostrado ser una fuente inigualable de beneficios para la salud y el bienestar. En este artículo, os mostramos algunas de las ventajas por las que deberíamos aumentar el consumo de legumbres hasta en 4-5 raciones a la semana:
1. Son baratas. Por lo que, aumentando su consumo reduciremos la ingesta de proteína animal, disminuyendo así el coste de la compra y el impacto medioambiental.
2. Son un buena fuente de proteínas. Las legumbres tienen entre un 19 y un 36% de proteínas en su composición. Lo que supone que, estas semillas, contienen el doble de proteínas que el trigo y el triple que el arroz.
3. Tienen una larga caducidad. Tanto si las consumimos en crudo como si son en conserva, tienen una larga caducidad. Por lo que son un buen fondo de despensa.
4. Contienen fibra, vitaminas y minerales. Las legumbres, que incluyen frijoles, lentejas, garbanzos y guisantes, son verdaderas potencias nutricionales. Son una fuente abundante de fibra dietética, esencial para la salud digestiva y el control del peso. Así como para ayudar a mantener estables los niveles de azúcar en sangre y a reducir el colesterol. Además, las legumbres también están llenas de vitaminas y minerales esenciales, como hierro, calcio, magnesio y vitaminas del complejo B.
Al sustituir alimentos con grasas poco saludables por legumbres, estaremos mejorando nuestro aporte nutritivo y perfil de grasas, y por ende nuestras salud.
5. Son fáciles y rápidas de cocinar. Las legumbres son increíblemente versátiles en la cocina. En conserva son comida rápida, ¡pero de la buena! Complementándolas con verduras y proteínas, conseguimos platos nutritivos y saludables en 5 minutos. Además, sus sabores y texturas únicos se prestan a una amplia variedad de preparaciones culinarias, lo que significa que nunca te aburrirás al incorporar legumbres en tu dieta.
Ahora que has descubierto las principales razones por las que consumir legumbres, es el momento de que las incluyas en tu menú semanal en cuatro o cinco ocasiones. En ensaladas, guisos, salteadas, en platos combinados… Cuida tu alimentación y come de manera equilibrada, ¡notarás los beneficios muy rápido!